CASCOS DE AUDIO
1. CASCOS ABIERTOS.
Los cascos de tipo abiertos tienen una estructura que permite al sonido escapar y entrar, limitando la capacidad sónica y dando una reproducción más fiable.
Funcionan muy bien en ambientes tranquilos, ya que como dejan entrar el sonido exterior, provoca que tengamos que aumentar el volumen de estos para poder escuchar la música o el sonido que estemos escuchando, pudiendo provocar daños a nuestros oídos.
Son los idóneos para mezclar música ya que reproducen mas fielmente el sonido y además permiten entrar y salir sonido del ambiente, por lo que la escucha es más natural y más cercana a la que tendremos al escuchar en altavoces o monitores.
Dentro de estos podemos distinguir entre dos tipos de cascos, los circumaurales y los supra-aurales.
La diferencia reside en que los circumaurales rodean completamente toda la oreja apoyándose sobre la cabeza y los supra-aurales rodean la oreja pero se apoyan sobre ella, hecho que puede provocar que resulten más incómodos al realizar una escucha prolongada. En los supra-aurales tenemos la sensación de que el sonido es más cercano, lo cual es lógico por que tenemos el altavoz sobre la oreja, como si estuviésemos en un estudio.
2. CASCOS CERRADOS.
Los cascos cerrados, tienen una estructura solida que no permite al sonido entrar ni escapar, lo que puede ayudar a la experiencia auditiva, ya que nada nos distraerá de la música o del sondo que estemos escuchando.
Al estar cerrados, la calidad del sonido puede verse afectada, ya que al no poder escapar el sonido de la cavidad auditiva, puede crearse distorsión porque las ondas sonoras rebota una y otra vez.
Este tipo de cascos son ideales para grabación musical, ya que el micrófono no captará sonido de los cascos puesto que estos no dejan salir nada, evitándose un posible acople o realimentación del sonido.
Dentro de estos se puede hacer la misma distinción que en el caso de los cascos abiertos: circumaurales y supra-aurales.
Los circumaurales como se explicó antes rodean la oreja y se apoyan en la cabeza, por lo que aislan completamente el oído del exterior, ya que una almohadilla de espuma hace de sello, cosa que no ocurre con los supra-aurales, que al descansar sobre la oreja, no crean un sello completo. Los circumaurales hay veces que pueden ser incómodos ya que pueden apretar demasiado, pudiéndose arreglar el problema con unas almohadillas adecuadas.
Como conclusión final se puede decir que ambos tipos pueden ser igualmente válidos, la elección siempre será del usuario y totalmente subjetiva, debido al gusto de cada uno.
Los cascos de tipo abiertos tienen una estructura que permite al sonido escapar y entrar, limitando la capacidad sónica y dando una reproducción más fiable.
Funcionan muy bien en ambientes tranquilos, ya que como dejan entrar el sonido exterior, provoca que tengamos que aumentar el volumen de estos para poder escuchar la música o el sonido que estemos escuchando, pudiendo provocar daños a nuestros oídos.
Son los idóneos para mezclar música ya que reproducen mas fielmente el sonido y además permiten entrar y salir sonido del ambiente, por lo que la escucha es más natural y más cercana a la que tendremos al escuchar en altavoces o monitores.
Dentro de estos podemos distinguir entre dos tipos de cascos, los circumaurales y los supra-aurales.La diferencia reside en que los circumaurales rodean completamente toda la oreja apoyándose sobre la cabeza y los supra-aurales rodean la oreja pero se apoyan sobre ella, hecho que puede provocar que resulten más incómodos al realizar una escucha prolongada. En los supra-aurales tenemos la sensación de que el sonido es más cercano, lo cual es lógico por que tenemos el altavoz sobre la oreja, como si estuviésemos en un estudio.
2. CASCOS CERRADOS.
Los cascos cerrados, tienen una estructura solida que no permite al sonido entrar ni escapar, lo que puede ayudar a la experiencia auditiva, ya que nada nos distraerá de la música o del sondo que estemos escuchando.
Este tipo de cascos son ideales para grabación musical, ya que el micrófono no captará sonido de los cascos puesto que estos no dejan salir nada, evitándose un posible acople o realimentación del sonido.
Dentro de estos se puede hacer la misma distinción que en el caso de los cascos abiertos: circumaurales y supra-aurales.
Los circumaurales como se explicó antes rodean la oreja y se apoyan en la cabeza, por lo que aislan completamente el oído del exterior, ya que una almohadilla de espuma hace de sello, cosa que no ocurre con los supra-aurales, que al descansar sobre la oreja, no crean un sello completo. Los circumaurales hay veces que pueden ser incómodos ya que pueden apretar demasiado, pudiéndose arreglar el problema con unas almohadillas adecuadas.
Como conclusión final se puede decir que ambos tipos pueden ser igualmente válidos, la elección siempre será del usuario y totalmente subjetiva, debido al gusto de cada uno.
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